martes, 12 de marzo de 2013

Anestesia...

Hay palabras que no consuelan,
otras tantas que ya no tienen sonido,
hay sonidos que descocen los sentidos,
y otros tantos que ya no tienen sentido,
son como pequeños gritos de dolor...

Entre sonidos y silencios
me voy fundiendo entre tus pliegues y balbuceos,
tratando de ser tu anestesia,
tu sinemet, tu control de movimiento,
tu alimento temporal...

Te veo y no te veo, algo en ti ya no esta,
me veo sigilosamente, algo de mi se fue contigo,
tanto esfuerzo y nada,
tanto amor y nada,
todo se desvanece tras tus ojos cristalinos
que piden a gritos piedad…

Te observo así tan frágil,
tan sin ti, lejano, moribundo,
tan solo, desconsolado,
sin fuerzas por la vida
y sin ganas de la muerte,
en un impase celestial
que no comprendes,
que nadie comprende,
pero estás así,
tan sin ti y yo contigo...

Te hablo de reojo y te beso la frente,
te abrazo, sintiendo tus huesos,
el hambre por la vida se te esta agotando,
tanto, que tu boca ya no quiere hablar,
tus palabras no tienen sonido,
y tus sonidos ahora son silencios,
te cansaste de vivir,
lo puedo sentir y lo siento,
lo siento, lo siento, lo siento...
(Quisiera ser tu anestesia)

3 comentarios:

Batfink dijo...

A veces cuando va pasando el efecto del sinemet es difícil pero el que estés ahí a su lado hace toda la diferencia del mundo... No pierdas el ánimo

Anónimo dijo...

Entiendo lo que pasas, que la vida te de paz y que te acompañe siempre...

Un abrazo

EC

Alondra dijo...

Lo has expresado con mucha ternura, estoy en una situación similar y a veces pienso que está el envase pero el regaló es como si se perdiera en un desván donde no entra la luz... lo único que me consuela es que espero no sea consciente de lo que le sucede y me deje el sufrimiento a mí.
¿Qué puedo decirte?... lo que me digo a mi misma: lo mejor de él ya te pertenece que la vida no le de más de lo que pueda soportar.
Un abrazo grande